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lunes, 4 de julio de 2011

‘Transformers 3’: Cuando la brecha generacional se siente

Transformers 3: El lado oscuro de la Luna (Transformers 3: Dark of the Moon) Dirección: Michael Bay Elenco: Shia LaBeouf, Rosie Huntington Whitley, Frances McDormand.">

Transformers 3: El lado oscuro de la Luna (Transformers 3: Dark of the Moon) Dirección: Michael Bay Elenco: Shia LaBeouf, Rosie Huntington Whitley, Frances McDormand.

Seguro podemos hallar argumentos que amortigüen la decepción de Transformers 3: El lado oscuro de la Luna. 1) En el fondo nadie espera una gran película, 2) Lo importante son los efectos, 3) Está basada en una línea de juguetes, ya sabemos que la trama no rendirá para mucho, 4) Dicen que la que se quedó en lugar de Megan Fox es modelo de Victoria’s Secret.

Toda la indulgencia y buena voluntad cinéfila de la que seamos capaces frente a la tercera entrega de esta franquicia, dirigida por Michael Bay, no será suficiente para evitar que nos quede debiendo mucho y, simplemente, no justifique su existencia.

Después de salvar al mundo de los Decepticons y recibir una medalla de parte del presidente Obama, la siguiente misión de Sam Witwicky (Shia LaBeouf) es regresar a la normalidad y encontrar empleo. Optimus Prime y los Autobots, mientras tanto, se han aliado al gobierno norteamericano para evitar que los humanos continúen destruyéndose a si mismos.

Buscando aumentar el valor cinematográfico de esta franquicia, dañada por conflictos internos entre director, actores y guionistas quienes, básicamente, se culparon mutuamente de estar muy por debajo de todas las marcas del cine americano, los productores pensaron en un guión elaborado y una transfusión de sangre nominada al Premio de la Academia.

Como resultado, El lado oscuro de la Luna ubica el origen de los Transformers en los años sesenta del siglo pasado y sugiere que el viaje a la Luna fue un pretexto para que el gobierno norteamericano hiciera contacto con la raza Autobot. Esta ‘complejidad’ agregada al guión se abrevia en un prólogo de escenas históricas lujosamente producidas al que Michael Bay sólo quiere que le prestemos atención como si fuera una nota al pie y no una narrativa que nos haga pensar demasiado.

Pasados estos primeros diez minutos de ‘complejidad’, lo que resta es una loop de llanta quemada, pésimos diálogos y modelos en pose. Hablando justamente de poses, la nueva musa de Bay (o mejor dicho, objeto) Rosie Huntington Whitley, viene entrenada de las pasarelas y, a diferencia de Megan Fox, no tiene problema alguno con posar, verse bonita y sugerente. Irónicamente, Rosie Huntington tiene más diálogos y escenas que Megan Fox y el mayor estímulo de Transformers 3 es decidir si Rosie lo hace mejor que Megan.

Utilizados como accesorios, aparecen ganadores del Oscar y actores fetiche de los hermanos Coen: Frances McDormand, John Turturro, John Malkovich, haciendo un ridículo doloroso, muy lejos de su zona de confort de diálogos excelsos y planos estudiados.

No es posible ignorar el espectáculo de tecnología de Transformers 3 como tampoco es posible darle importancia en el género de blockbusters. Michael Bay ha comandado un monumento de efectos visuales, pero su dirección es genérica y repetitiva al grado que, si sobreponemos las secuencias principales de sus anteriores películas (Armageddon , Pearl Harbor y Transformers 1 ) veremos, no el estilo de autor que se empeñan en atribuirle a Bay, sino a un director atrapado en la misma escena.

El mayor error que Transformers viene arrastrando desde su segunda parte (The Revenge of the Fallen, 2009) es la arrogancia de su duración. Ciento cincuenta y siete minutos que, sin problema, podrían reducirse a noventa. Si esta película durara una hora y media, yo le perdonaría todo.

Criticar a esta clase de películas, que a todas luces son una máquina de dinero sin frenos, es un poco absurdo; como gritarle a la pantalla durante una función. Mientras los críticos despotricamos y el público entre quince y veinticinco años (que es lo más importante para Hollywood) la celebra como un evento cinematográfico, Transfomers 4 ya se prefigura, al igual que otra película basada en un juego de mesa de Hasbro (la marca de Transformers), La Ouija . Prepárense también para la trama de ésa.

twitter.com/macsimiliano
http://www.formspring.me/macsimilian

Cuadro X cuadro
Christopher Nolan presenta…

A menudo, es interesante saber qué le gusta a los directores que uno admira. Esos gustos pueden reflejarse en la dieta cultural de nuestros ídolos (lo que leen, ven y escuchan durante el año) o, de un modo más preciso en los proyectos de otros cineastas que deciden producir. Por lo general, Christopher Nolan sólo ha aceptado producir los filmes que concibe junto a su hermano Jonathan. Su crédito de productor en la próxima cinta de Superman es un compromiso más que un interés personal.

Los estudios Warner Bros. quieren que Nolan transmita algo de la genialidad de Dark Knight a El Hombre de Acero. Esta semana se dio a conocer que el director de Inception producirá un thriller sobrenatural escrito y dirigido por el debutante Keith Gordon. Este podría ser el primer crédito de productor de Nolan basado en gustos personales y no en un ‘quid pro quo’ con el estudio que lo tiene contratado. Nolan y su coproductora Emma Thomas figuran como productores ejecutivos y será el brazo derecho de Nolan, Jordan Goldberg quien haga las veces de productor.


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